Los humanos mal vibrohos atacan como locos, me buscan hasta de noche, se aparecen hasta de día. Los humanos mal vibrosos me atesoran, quieren tener esa experiencia cuerpo a cuerpo, quieren consumir vibrita y transformarla, sacale escencia poderosa y chispearla por su cuerpo.
Esos humanitos son muy comelones, chupan, chupan de un modo enfermamente consumista, a esos humanitos yo les pongo un alto, hay limites.
Hay cosas que en ocasiones es mejor no recibir, hay pensamientos meditados ya que nos pueden guiar por un modo correcto de como obrar. Me es dificil explicarme, me es facil relajarme y diluirme. Sea cual sea el liquido, me es sencillo dejarme flotar, ahogar.
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